Cómo trabajo en terapia: enfoque basado en resultados

En mi consulta, mi prioridad es ofrecer un tratamiento eficaz y basado en la evidencia científica para ayudarte a alcanzar un bienestar real y duradero. Para ello, sigo un proceso estructurado en tres fases: valoración, tratamiento individualizado y alta con seguimiento. Mi enfoque se basa en la psicología cognitivo-conductual, la neurociencia y en terapias de tercera generación, como el mindfulness y la activación conductual, garantizando intervenciones adaptadas a cada caso.

1. Valoración inicial: comprendiendo tu caso

La primera fase del proceso consiste en una evaluación detallada de tu situación. En las primeras sesiones:

  • Exploramos los motivos que te han llevado a consulta y los objetivos terapéuticos que deseas alcanzar.
  • Utilizamos entrevistas clínicas y, si es necesario, pruebas psicológicas para obtener una visión clara del problema.
  • Establecemos una hipótesis diagnóstica y un plan de tratamiento adaptado a tus necesidades.

2. Tratamiento individualizado: estrategias eficaces para el cambio

Cada persona es única, por lo que el tratamiento se adapta a tus características personales y a los objetivos establecidos. Durante esta fase:

  • Aplicamos técnicas de eficacia demostrada que provienen de la corriente más eficaz de la psicología la terapia cognitivo conductual, algunas de esas técnicas son: la reestructuración cognitiva, la exposición con prevención de respuesta, la activación conductual, estrategias de regulación emocional…
  • Incorporamos herramientas basadas en la neurociencia y el mindfulness para mejorar la regulación emocional y el bienestar.
  • Trabajamos en la modificación de patrones de pensamiento y conducta que mantienen el malestar.
  • Te proporciono herramientas y ejercicios prácticos para que puedas consolidar los avances fuera de la consulta.

3. Alta con seguimiento: consolidar los logros alcanzados

Una vez que se han alcanzado los objetivos terapéuticos y el paciente ha adquirido la autonomía necesaria, pasamos a la fase de alta. Sin embargo, el proceso no termina aquí:

  • Se establecen sesiones de seguimiento espaciadas en el tiempo para consolidar lo aprendido y prevenir recaídas.
  • Se revisan los progresos y se refuerzan las estrategias adquiridas en terapia.
  • Si en algún momento es necesario, siempre existe la posibilidad de retomar el proceso.

Un enfoque centrado en resultados

El objetivo de mi trabajo es ofrecerte herramientas prácticas y eficaces para mejorar tu calidad de vida. No busco alargar la terapia innecesariamente, sino que trabajamos con un enfoque centrado en resultados, asegurando que cada sesión tenga un propósito claro y que avances de manera progresiva.

Si estás buscando un proceso terapéutico estructurado, basado en la evidencia, que integre la neurociencia, el mindfulness y técnicas de eficacia comprobada, estaré encantado de acompañarte en este camino hacia el bienestar.

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